lunes, 9 de marzo de 2009

¡Bienaventurados los espontáneos!


Muy bien. El periodismo ciudadano, o lo que quiera que eso signifique, existe. Pero así como ése, habría que admitir también, suponemos, una medicina ciudadana, una abogacía ciudadana, una ingeniería ciudadana e incluso, ¡albricias!¿por qué no?, un sacerdocio ciudadano. Que todo aquel al que le parezca loable prestar sus buenas intenciones al beneficio colectivo, coja un bisturí, recete vitaminas, reparta herencias o declare la inocencia de un acusado.

Total, si eso es democratizar –con toda inconsistencia actual de la propia palabra-, bienvenido sea. ¿Estaría todo el mundo tan de acuerdo acaso? ¿Estarían los médicos de acuerdo, o los abogados? Todos tendrían derecho a ejercer la función que les plazca, sin estar necesariamente formados para ello. Sin embargo, y para el disgusto de los democráticos, las buenas intenciones no son suficientes. El conocimiento, que para algo se construye y transmite, diferencia al médico del mecánico, al músico del letrado, al ingeniero del decorador. La experiencia profesional de uno sobre otro marcará la diferencia, y eso incluye también al periodismo, al que se ha agregado además el sufijo ciudadano como si la prensa estuviese dirigida a edificios o automóviles y no a personas.

El llamado periodismo 3.0, la bienaventurada calentura de los blogs y la proliferación de reporteros espontáneos supone para muchos una panacea. Y no falta quien tire la primera piedra contra los medios de comunicación, los que afirman que al fin ven en el enjambre de “escribidores” de crónicas en blogs o “grabadores” de accidentes en el móvil un antídoto para el pérfido poder mediático. Semejante razonamiento es ingenuo e insuficiente.

Hace dos años, en el VII Congreso de Periodismo de Huesca los periodistas José Cervera y Javier Monjas debatieron al respecto. Mojas, editor de nuevodigita.com, dijo: "El periodismo ciudadano no existe", a lo que Cervera ('blogger' de 20minutos.es) respondió no sólo sobre su existencia, incluso aseguró que "es más democrático y eficiente".

Nadie niega la conmovedora y democrática posibilidad de que todos pudiésemos hacer aquello que creamos mejor y más justo. No falta quien diga, en el bar: “Si yo fuera presidente de gobierno…Hombre, si yo fuera Juande... Si yo fuera Guti, o la Merkel”. Pero la vida civilizada, así de injusta, exige credenciales más firmes que el voluntarismo. Qué más quisieran los aspirantes a escritores, diputados, jueces, entrenadores o futbolistas; los que siempre lo harían mejor; los que dicen saber más sólo porque así lo creen. Que el periodismo sea descrito como oficio no quiere decir que cualquiera pueda desempeñarlo. Hasta el más elemental carpintero necesita entender la madera que esculpe para confeccionar una silla hermosa y funcional. Lo mismo, exactamente lo mismo, ocurre con el periodismo.

El monopolio de la información no es, en absoluto, una disculpa, un motivo o una justificación. Éste fue el debate de los años setenta con el periodismo alternativo una fórmula que nació queriendo ser independiente y terminó enredándose en los hilos de subvenciones, tan peligrosos y comprometedores como el resto. Si usted, querido lector, quiere ver un ejemplo de cuán frágiles son estas “robinhoodsescas” epopeyas de vecindario, le invito a visitar http://www.aporrea.org/ o http://www.el23.net/.

Entonces, nos hemos puesto de acuerdo. Habrá periodistas ciudadanos en tanto otras profesiones lo sean. Habrá que ver si gozarán de visto bueno las nuevas ciudadanías profesionales ¿Todo el que tenga un blog puede ser periodista? Claro, de la misma manera que todo el que se compra una bata blanca puede ser médico. Ahora, que el paciente sobreviva o no, ése es otro asunto

10 comentarios:

Sensitive Eye. dijo...

TIENE USTED TODA LA RAZÓN SRA. PERIODISTA!!!!

muy buen post!

F.J. Cristófol dijo...

Yo estaba pensando en hacerme 'Médico ciudadano', a ver cuánto tarda en llegar la Guardia Civil...

La KSB dijo...

Fran: JA ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja . Su... ¡gracias mamita, estamos de acuerdo".

Clavel Rangel dijo...

Karina, y pensar que aquí en Guayana a unos concejales se les ocurrió la flamante idea de incorporar al "premio municipal de periodismo" a los "periodistas comunitarios", sin categorías.. todos contra todos. Je!

Anónimo dijo...

El hecho de que hayan blogs y bitácoras no quiere decir que los autores seamos periodistas, es como pretender que por el hecho de volar 4 horas diarias en los helicópteros de los juegos digitales, me vaya a ganar la licencia de aviador. Pero en lo que sí contribuyen con los comunicadores sociales y con el periodismo en general, es en tener la percepción de que hay un público muy enterado al cual no podrán engañar, así lo quieran.

Unknown dijo...

Señorita, su opinión es respetable, siempre lo será la buena intención en el resguardo del conocimiento profesional.
Tiene usted razón, no todo el que tenga un blog puede ser periodista; sin embargo, usted, ya con alguna carrera transitada, si la tiene, debería estar segura de que el conocimiento que usted menciona, se construye y trasmite no sólo en y desde un aula de clases académicas, y no admitirlo sería un acto muy jactancioso, tanto falso como ingenuo. Se hace casi imposible, por más que la mueva el sentimiento, comparar el oficio científico con el periodístico o el de las letras, pero sobre todo con el periodístico. Semejante razonamiento también es ingenuo e insuficiente. También es conmovedor y justo su alegato a favor de ésta profesión, tan corrupta en la actualidad, pero la vida civilizada, así de injusta, exige: una ética más firme que un simple título.
Tiene razón, no cualquier ciudadano puede desempeñar el oficio, pero tampoco cualquier “Periodista” puede. Con esta posición, usted lo único que revela es un gran conservadurismo y rechazo a la realidad actual. El debate sobre el asunto, no sólo perteneció a los años setenta, pertenecerá siempre a la historia de la contienda por la ética informadora. Si usted, querida periodista, quiere ver un ejemplo de cuán frágiles son estas defensas por el periodismo académico, le invito a visitar con atención, detenimiento y sinceridad, todos los diarios y semanarios dirigidos, elaborados y “pensados” por profesionales periodistas con credenciales bastante reconocidas y “firmes” dentro del gremio y la opinión pública. Aún así, podemos seguir tapando el sol con un dedo, nadie se daría cuenta que igual quedamos encandilados.
Le deseo éxito y suerte en su desempeño, pero sobre todo, lucidez sincera y sabia autocrítica; la mayoría de los grandes maestros periodistas de la historia, no fueron nunca a una escuela de Periodismo.

La KSB dijo...

"Tiene razón, no cualquier ciudadano puede desempeñar el oficio, pero tampoco cualquier “Periodista” puede", una frase magnífica, que vuelve mis pies de barro. Sin duda es cierto, como una catedral; gracias.

Anónimo dijo...

Creo que el tema dá para seguir discutiendo. Los argumentos del señor "A" también son dignos de ser analizados friamente. Pero en realidad eso no es lo que me parece importante, sino tu capacidad para admitir sin dilaciones que puedes estar equivocada. Si antes eras digna de admiración, ahora, al leer algo donde se evidencia tu humildad como "vuelve mis pies de barro" hace que seas más digna de admiración. Eso es todo.

La KSB dijo...

Hombre, Alí... me alegras la tarde. ¡Gracias!

La KSB dijo...

Mensaje para una letra.
Estimado Sr. A: he estado varios días dándole la vuelta a su comentario. He buscado un perfil o un blog y no doy con ninuno. Si existe usted, que estoy segura de que así será, ¿dónde puedo leerle?
Gracias